Como ya sabemos, hoy en día, los radares
tienen una gran cantidad de usos y funciones. Entre los usos que se le puede dar
a un radar, se encuentra el hecho de medir el clima. Con esto, se podría
plantear una interrogante la cual dice: ¿Vale la pena poseer un radar climatológico (o meteorológico) para
medir de manera efectiva el clima o su estado?
Los radares meteorológicos, son aparatos que
nos permiten saber el estado del clima, ya sea inmediato o hacia futuro. Con
este, se puede determinar, si hay una tormenta, si hay formaciones de nubosas,
si el cielo está despejado o si se encuentra otro tipo de alteración climática.
Pablo lago, profesor del instituto
geofísico del Perú dice: “El uso de los radares meteorológicos es de gran
importancia hoy en día puesto que este nos permite saber el estado del tiempo
inmediato por un costo relativamente
bajo.”
Para
entender un poco la aclaratoria realizada por este profesional del tema,
primero tenemos que saber, que para medir el clima de una manera completa solo existen dos dispositivos que nos permiten
realizarlo. El primero, son los sistemas satelitales los cuales permiten
obtener un amplio panorama del estado del clima, pero posee muchas desventajas
más que todo desde el punto de vista económico, de transporte y de acceso. El
segundo aparato que nos permite determinar el estado del clima es el radar
meteorológico.
El radar meteorológico, presenta muchas
ventajas contra los satélites, debido a que son más económicos, es mucho más
fácil su mantenimiento, sus componentes pueden ser trasladados de una forma
relativamente sencilla y para acceder a ellos no hay que realizar grandes
gastos de recursos económicos. Entre los satélites y los sistemas de radar, se
obtienen casi los mismos resultados, solo que los satélites tienen un rango de
alcance de mayor amplitud.
Los radares meteorológicos comenzaron a
utilizarse entre los años 50 y 80 del siglo XX, cuando se descubrió que los
radares de aviación comunes retornaban ecos cuando las microondas que estos
despedían rebotaban contra las grandes formaciones de nubes en el espacio aéreo.
A medida que fue avanzando el tiempo, estos radares fueron cambiando de aspecto
y se convirtieron en los radares meteorológicos de hoy en día, los cuales gráficamente
pueden ser descritos como grandes “pelotas de color blanco”. Estas “pelotas”,
están compuestas por un material reflexivo que contiene un gran número de mini
radares, los cuales están siempre fijos en un mismo lugar. Cabe destacar que
necesariamente los radares meteorológicos deben estar siempre en un mismo lugar,
para observar con precisión las alteraciones
del clima.
Pero como todas las cosas el uso de los
radares meteorológicos presenta algunas desventajas. Esto es explicado en la
revista Tiempo de la ciudad de Barcelona (España) por el profesor y experto en meteorología
Marc Berenguer. “El uso de los radares climatológicos es una muy buena opción para
determinar de forma precisa el estado del clima, pero en ocasiones la atenuación
de las ondas afecta el alcance de estas”.
En resumen, se puede argumentar que el uso de los radares meteorológicos es de
gran importancia, ya que con este se puede medir el clima a un costo económico mucho
menor que con un satélite. Además, a la hora de comparar, se puede añadir que son muchas más las ventajas que las
desventajas que traen estos potentes aparatos.
Atenuación:
Es el hecho mediante el cual una onda se debilita.
BIBLIOGRAFIA:
1._
Lagos Pablo (2012), Radares
meteorológicos: Aplicación en el seguimiento y pronóstico de tormentas. (Información sobre
los radares meteorológicos). Disponible en: http://jro.igp.gob.pe/subwebs/tallerradares/documents/lagos_presentacion.pdf
(15-12-15).
2._
Berenguer Marc (5) Atenuación de los radares meteorológicos. Revista tiempo. Año
(2013). 12. Barcelona, España.
